Una vez caminando, viajé por todo el espectro del valor. Desde el uno menor de la divisibilidad hacia el uno mayor de la unidad. Terminé mi jornada en el sol del atardecer, brillante, nostálgico, cobrizo... un domingo. No protagonizé ninguna de las estancias de dicho espectro, pero observé todo y anoté en mi cuaderno hacia el final del día:
"Cómo me encantaría adquirir un anillo de oro con un sol grabado. Un anillo de matrimonio con el sol y mi ciudad toda..."
Entonces vino a mi mente la siguiente condición:
"No podrás adquirir dicho anillo a menos que consigas en algún lugar de la ciudad otro tan barato como un centavo, en el peldaño más bajo del espectro del valor. Solo asi podrás usar genuinamente este anillo matrimonial.
Ceremonial."
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